Diferencias entre EINF y CSRD
La diferencia entre EINF y CSRD ha cobrado gran relevancia en el ámbito de la sostenibilidad empresarial, especialmente tras los cambios regulatorios impulsados por la Unión Europea. Ambas normativas están diseñadas para garantizar la transparencia en los reportes de sostenibilidad, pero presentan características y enfoques que marcan un antes y un después en la forma en que las empresas deben reportar su impacto ambiental, social y de gobernanza. A continuación, te explicamos cómo estas normativas se relacionan y qué implica la transición de una a otra.
Diferencias entre EINF y CSRD
La EINF (Estado de Información No Financiera) y la CSRD (Corporate Sustainability Reporting Directive) son normativas diferentes, aunque están conectadas. Mientras que la EINF estableció las bases para la divulgación de información no financiera, la CSRD supone una evolución significativa, ampliando su alcance y reforzando los requisitos para las empresas.
La principal diferencia radica en que la EINF se centraba en un grupo reducido de empresas y permitía flexibilidad en los estándares, mientras que la CSRD abarca a más organizaciones, introduce normas obligatorias (ESRS) y exige una verificación externa de los informes.
Esta evolución responde a la necesidad de garantizar reportes más detallados, comparables y verificables, alineados con los objetivos de sostenibilidad de la Unión Europea.
A continuación, exploramos las diferencias clave y el impacto que esta transición tiene para las empresas y la sociedad en su conjunto.
Un Cambio de perspectiva: De la EINF a la CSRD
La EINF estableció las bases para que las empresas comenzaran a reportar sobre sostenibilidad, pero su alcance limitado y flexibilidad en los estándares dificultaban la uniformidad en los informes. En cambio, la CSRD redefine estas obligaciones, marcando un enfoque más estructurado y ambicioso:
- Más empresas afectadas: La CSRD amplía la obligatoriedad a medianas empresas cotizadas y subsidiarias de grupos internacionales.
- Estándares obligatorios: Introduce los European Sustainability Reporting Standards (ESRS), garantizando una mayor uniformidad y consistencia en los informes.
- Doble materialidad: Va más allá de cómo los factores ESG afectan a la empresa; también evalúa cómo la empresa impacta en su entorno.
Con estas mejoras, la CSRD responde a la creciente demanda de inversores, consumidores y reguladores por información más precisa y útil sobre sostenibilidad.

Contexto histórico y regulatorio
EINF: La base de la sostenibilidad corporativa
La EINF (Estado de Información No Financiera) fue introducida con el propósito de complementar la información financiera de las empresas con datos sobre su impacto ambiental, social y de gobernanza (ESG). Sin embargo, su alcance estaba limitado a un grupo reducido de grandes empresas, y permitía flexibilidad en la elección de los estándares de reporte. Esto generó desafíos significativos en términos de comparabilidad y credibilidad de los informes, ya que cada empresa podía seguir enfoques diferentes, dificultando la evaluación por parte de inversores y otras partes interesadas.
CSRD: Una respuesta a la necesidad de mayor rigor
La CSRD (Corporate Sustainability Reporting Directive) nace como una evolución de la EINF, impulsada por la creciente demanda de inversores, reguladores y consumidores de reportes de sostenibilidad más detallados, estandarizados y verificables. Esta nueva normativa busca establecer un marco uniforme que garantice la calidad de la información, aumentando la confianza en los datos reportados y asegurando que las empresas estén alineadas con los objetivos climáticos y sociales de la Unión Europea.
Con la CSRD, se marca un nuevo estándar en sostenibilidad corporativa, que no solo amplía el alcance de las empresas obligadas a reportar, sino que también refuerza la transparencia y la responsabilidad empresarial.
Principales diferencias entre EINF y CSRD
1. Ampliación de la obligatoriedad
De grandes empresas a una cobertura más amplia
Bajo la EINF, solo las grandes empresas y entidades de interés público estaban obligadas a reportar su impacto en cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG). Esto limitaba su alcance a aproximadamente 11.700 organizaciones en toda la Unión Europea, dejando fuera a muchas empresas que también generan impactos significativos.
Con la llegada de la CSRD, el panorama cambia drásticamente. La nueva normativa amplía su obligatoriedad a:
- Empresas con más de 250 empleados o ingresos superiores a 40 millones de euros.
- PYMEs cotizadas, aunque con criterios más flexibles para evitar sobrecargar a estas organizaciones.
- Subsidiarias de empresas extranjeras que operen dentro de la Unión Europea.
Esta ampliación implica que más de 50.000 empresas estarán obligadas a cumplir con los requisitos de reporte, aumentando considerablemente la transparencia y la rendición de cuentas en sectores clave.

Cambio de Enfoque: De la Materialidad Financiera a la Doble Materialidad
Uno de los cambios más relevantes introducidos por la CSRD es el paso de la materialidad financiera al concepto de doble materialidad, lo que transforma profundamente la forma en que se evalúan los factores ESG.
- Materialidad financiera (EINF): Se centraba exclusivamente en cómo los factores ambientales, sociales y de gobernanza impactaban en los resultados financieros de la empresa. Este enfoque, aunque útil, proporcionaba una visión limitada del contexto empresarial.
- Doble materialidad (CSRD): Analiza tanto:
- Cómo los factores ESG afectan a la empresa.
- Cómo las actividades de la empresa impactan en el medio ambiente y la sociedad.
Esta perspectiva integral permite a las partes interesadas evaluar no solo los riesgos y oportunidades de sostenibilidad, sino también el impacto real de las operaciones empresariales en su entorno.
2. Requisitos de verificación y auditoría externa
De la confianza limitada a la credibilidad asegurada
Bajo la EINF, los reportes de sostenibilidad no requerían verificación externa obligatoria, lo que podía generar dudas sobre la precisión y fiabilidad de los datos presentados.
En contraste, la CSRD introduce la obligatoriedad de que los informes sean auditados por un tercero independiente. Este requisito garantiza que la información reportada sea:
- Verificable y consistente con los estándares de calidad.
- Confiable para inversores, reguladores y otras partes interesadas.
Esta medida fortalece la credibilidad de los reportes de sostenibilidad y alinea la información no financiera con los altos estándares de los reportes financieros.
3. Ampliación de áreas temáticas cubiertas
De los fundamentos a una visión holística
Mientras que la EINF se enfocaba en áreas básicas como el medio ambiente, los derechos humanos y la lucha contra la corrupción, la CSRD amplía significativamente las temáticas cubiertas para reflejar las prioridades actuales en sostenibilidad. Estas áreas adicionales incluyen:
- Cambio climático y su impacto financiero: Cómo las operaciones empresariales contribuyen al cambio climático y cómo este afecta a la organización.
- Igualdad de género y diversidad en la gobernanza: Inclusión de métricas sobre diversidad en la toma de decisiones y en los equipos directivos.
- Consumo de recursos naturales y biodiversidad: Evaluación del uso de recursos y del impacto en los ecosistemas.
- Sostenibilidad en la cadena de suministro: Transparencia sobre prácticas sostenibles a lo largo de toda la cadena productiva.
Con este enfoque más amplio, la CSRD asegura que las empresas aborden tanto las preocupaciones actuales como las futuras, contribuyendo a un marco más integral de sostenibilidad corporativa.
Impacto de la Transición de EINF a CSRD
Sectores Afectados

La CSRD impacta especialmente a sectores con altas emisiones o que enfrentan escrutinio público, como:
- Energía y transporte.
- Agricultura y manufactura.
- Finanzas, debido a la necesidad de evaluar la sostenibilidad de las inversiones.
Preparativos Necesarios para Cumplir con CSRDD
Adoptar la CSRD requiere planificación, recursos y un enfoque estratégico para garantizar el cumplimiento de sus exigencias. Aquí te presentamos los pasos clave que toda empresa debe considerar para estar preparada:
- Capacitación del personal:
- Es fundamental que los equipos responsables, desde sostenibilidad hasta finanzas, comprendan a profundidad los requisitos de la CSRD y los estándares de reporte (ESRS).
- Recomendación: Organizar talleres formativos y sesiones con consultores especializados para garantizar una correcta interpretación y aplicación de las normativas.
- Implementación de sistemas de recopilación de datos:
- La calidad de los informes de sostenibilidad depende directamente de la capacidad de rastrear y gestionar métricas ESG.
- Acción clave: Adoptar herramientas tecnológicas y plataformas digitales que permitan centralizar y analizar datos relevantes, como emisiones de carbono, consumo de recursos y diversidad laboral.
- Colaboración con auditores externos como ATM Natura:
- La verificación independiente es un requisito de la CSRD, por lo que es esencial trabajar con auditores acreditados que aseguren la credibilidad de los reportes.
- Consejo práctico: Establecer una relación temprana con auditores para identificar posibles áreas de mejora antes del proceso de certificación.
Con una preparación adecuada, las empresas no solo cumplirán con la normativa, sino que podrán transformar la sostenibilidad en una ventaja competitiva.
Beneficios para las empresas y la sociedad
La transición hacia la CSRD no debe percibirse solo como una obligación regulatoria, sino como una oportunidad para generar valor tanto a nivel empresarial como social:
Para las empresas
- Mayor acceso a financiación sostenible:
La alineación con la CSRD facilita el acceso a fondos de inversión responsables, cada vez más relevantes en el mercado.
- Mejora de la reputación corporativa:
Cumplir con altos estándares de sostenibilidad fortalece la confianza de los stakeholders, desde clientes hasta inversores y empleados.
- Identificación de riesgos y oportunidades:
Los informes detallados permiten a las empresas anticiparse a riesgos regulatorios, climáticos o reputacionales, además de descubrir áreas para innovar.
Para la sociedad
- Mayor transparencia y rendición de cuentas:
Los ciudadanos y consumidores obtienen una visión clara del impacto corporativo, lo que fomenta una cultura de responsabilidad empresarial.
- Fomento de prácticas sostenibles:
La CSRD impulsa a las empresas a adoptar modelos operativos que respeten el medio ambiente, promuevan la justicia social y contribuyan a los objetivos climáticos globales.
Comparativa EINF-CSRD
La transición de la EINF a la CSRD no solo amplía el alcance de las empresas obligadas a reportar, sino que también introduce cambios sustanciales en la forma en que se estructuran y verifican los informes de sostenibilidad. En la tabla siguiente se resumen las diferencias clave entre ambas normativas, para que puedas realizar una comparación clara y directa.
Aspecto | EINF | CSRD |
Alcance | Empresas con más de 500 empleados. | Empresas con más de 250 empleados y PYMEs. |
Normas | Flexibles, elección de estándares. | ESRS obligatorios y estandarizados. |
Verificación externa | No requerida. | Obligatoria. |
Enfoque | Materialidad financiera. | Doble materialidad. |
Áreas cubiertas | ESG básicos. | ESG ampliado y detallado. |
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